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Fátima Cortés Leotte / Uruguay
Cónsul Honoraria de la República Oriental del Uruguay
A los 14 años se trasladó a vivir a España desde su natal Montevideo (Uruguay). Mª de Fatima Cortes Leotte estudio Derecho en la Universidad de Granada y comenzó su andadura profesional en 1981 montando primero su propio despacho y después en compañía de su esposo, Pedro Martin-Almendro. Tiene tres hijos: Manuel, Adriana y Guillermo. Le gustan los deportes al aire libre (especialmente el golf), el mundo del arte y el baile. Es cónsul honorario de la Republica Oriental del Uruguay con exequátur desde julio de 2014 aunque antes ejercía estas funciones para sus compatriotas en las provincias de Almería, Córdoba, Granada, Jaén y Malaga.
¿Qué es lo que más le llamó la atención de
España?
Su diversidad (¡hay montañas!) y la gastronomía.
¿Qué cosas de Cádiz le recuerdan a su tierra?
Toda la ciudad de Cádiz me recuerda a la ciudad vieja de Montevideo.
Si voy a su país, no me puedo ir sin probar...
El asado, el mate y sobre todo los carnavales (los más largos del mundo) con su candombe (baile afroamericano).
Si tuviera que hacer el eslogan turístico de su país, sería...
Adopto el oficial “Uruguay natural”.
Recomiéndeme un libro o película para comprender mejor su país...
La película Kaplan.
Un olor que le trasladé a su país sin necesidad de coger un avión.
Sin duda, el olor de los eucaliptos y de la tierra mojada por la suave lluvia.
Una canción de su infancia...
La cumparsita, de Carlos Galdel.
La misma emoción que un Madrid-Barca la tienes en…
Peñarol- Nacional.
Una playa para perderse…
Piriápolis o Cabo Polonio.
Un rincón para encontrarse.
La puesta de sol desde Rambla Punta Gorda, en Montevideo.
La persona de su país a la que más admira...
Hay muchos, desde históricos como Torres García por su concepto del espacio hasta escritores como Mario Benedetti; cantautores como Jorge Drexler, sin olvidar a nuestro último presidente José Mujica.
El estereotipo que más le molesta de su país es...
Quizá la melancolía.
El equivalente al ‘killo’ gaditano es...
¡Ché!
Aquí el Carnaval, ¿y allí?
¡También!
Para terminar, ¿bailamos?
Seguro que sí, ¿un tango?
Su diversidad (¡hay montañas!) y la gastronomía.
¿Qué cosas de Cádiz le recuerdan a su tierra?
Toda la ciudad de Cádiz me recuerda a la ciudad vieja de Montevideo.
Si voy a su país, no me puedo ir sin probar...
El asado, el mate y sobre todo los carnavales (los más largos del mundo) con su candombe (baile afroamericano).
Si tuviera que hacer el eslogan turístico de su país, sería...
Adopto el oficial “Uruguay natural”.
Recomiéndeme un libro o película para comprender mejor su país...
La película Kaplan.
Un olor que le trasladé a su país sin necesidad de coger un avión.
Sin duda, el olor de los eucaliptos y de la tierra mojada por la suave lluvia.
Una canción de su infancia...
La cumparsita, de Carlos Galdel.
La misma emoción que un Madrid-Barca la tienes en…
Peñarol- Nacional.
Una playa para perderse…
Piriápolis o Cabo Polonio.
Un rincón para encontrarse.
La puesta de sol desde Rambla Punta Gorda, en Montevideo.
La persona de su país a la que más admira...
Hay muchos, desde históricos como Torres García por su concepto del espacio hasta escritores como Mario Benedetti; cantautores como Jorge Drexler, sin olvidar a nuestro último presidente José Mujica.
El estereotipo que más le molesta de su país es...
Quizá la melancolía.
El equivalente al ‘killo’ gaditano es...
¡Ché!
Aquí el Carnaval, ¿y allí?
¡También!
Para terminar, ¿bailamos?
Seguro que sí, ¿un tango?