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26
Sep
2014

Cádiz, miembro de pleno derecho de la Unión de Ciudades Capitales de Iberoamérica

Cádiz forma parte desde hoy, con pleno derecho y como miembro asociado, de la Unión de Ciudades Capitales de Iberoamérica, tras la aprobación unánime de la XVI Asamblea Plenaria de la organización, que se celebra en estos días en Buenos Aires, Argentina.

La alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez y el teniente de alcaldesa de Desarrollo Cultural, Juan José Ortiz, participan como invitados en la Asamblea de la UCCI en la que esta tarde, a las 19 hora española, aproximadamente, ha tenido lugar la aprobación en Asamblea del punto en el que se proponía la inclusión de la ciudad de Cádiz como parte de la organización con la que se ha trabajado intensamente desde que en 2006 la capital gaditana optara y resultara elegida, por la UCCI, Capital Iberoamericana de la Cultura para 2012 con motivo de los actos de conmemoración del Bicentenario de la Primera Constitución Española.
Los antecedentes para la inclusión de Cádiz en la UCCI se remontan a finales de 2012, cuando una vez concluidos la mayor parte de eventos del Bicentenario, Cádiz solicita formalmente su inclusión en la organización en calidad de miembro asociado. Después de realizarse los trámites necesarios, en el pasado mes de marzo la alcaldesa recibía el escrito formal, firmado por el secretario general de la UCCI, Fernando Villalonga, confirmando que la solicitud sería incorporada en el orden de la XLVI reunión del Comité Ejecutivo y posteriormente se elevaría a votación plenaria de la Asamblea, ambas a realizar en este mes de septiembre en Buenos Aires.
Los Estatutos de la UCCI, en su artículo 5, recogen la posibilidad de incluir a miembros asociados con derecho a voz y voto, a grandes ciudades no capitales y áreas metropolitanas de Iberoamérica, bajo la aprobación de la candidatura presentada por el Comité Ejecutivo en la Asamblea Plenaria con una mayoría de dos tercios.
Hay que recordar que el Comité Ejecutivo de la UCCI está compuesto por dos copresidentes, alcaldes de Madrid y Quito, seis vicepresidentes, Jefe de Gobierno de Buenos Aires, alcalde de La Paz, alcalde de Santo Domingo, presidente de la Cámara Municipal de Lisboa, Intendente de Asunción y alcaldesa de San José de Costa Rica, y el secretario general de la organización. La Asamblea Plenaria está integrada por los alcaldes y alcaldesas de las, hasta hoy, 29 ciudades que conforman la UCCI.  
La alcaldesa, Teófila Martínez, ha destacado que este reconocimiento a la ciudad supone “un paso muy importante para Cádiz porque nos permite continuar la vinculación que tenemos con Iberoamérica y que tan importante supimos que sería en los comienzos de gestación de la conmemoración del Doce. Para Cádiz y los gaditanos supone un orgullo y un premio y reconocimiento al trabajo realizado que podamos formar parte de manera oficial de un órgano internacional con suficiente peso dentro del ámbito iberoamericano”.
La inclusión de Cádiz en la UCCI permitirá intensificar las relaciones con las capitales iberoamericanas, según lo acordado hoy en Buenos Aires, con una importante agenda de trabajo en los próximos dos años en materia de sostenibilidad urbana para conseguir una mejora en la calidad de vida en lo social, en lo económico, en lo cultural y en lo político.
   
La relación de Cádiz con la UCCI  
Con motivo de los actos de conmemoración del Bicentenario, Cádiz intensificó las relaciones con la UCCI, cuyos orígenes se remontan a comienzos de los años ochenta en la propia ciudad de Cádiz, sirviéndose de dichas relaciones para los contactos que se establecieron con los distintos países y ciudades iberoamericanas que fueron protagonistas en nuestra ciudad durante los actos del Doce.
El último de los grandes eventos de la UCCI en Cádiz tuvo lugar en noviembre de 2012, cuando tuvo lugar en la capital gaditana la reunión del XXVII Comité sectorial de Cultura por ser Cádiz durante ese año Capital Iberoamericana de la Cultura.   En dicho encuentro se puso en marcha, como herramienta propia del Comité de Cultura de la UCCI, la Red Cultural de Ciudades Iberoamericanas, que tendría vocación integradora con el objetivo de facilitar el intercambio eficaz de experiencias en distintos campos de la producción cultural y con énfasis en las acciones favorecedoras del desarrollo económico en el ámbito de las industrias culturales.
Se aprobó que dicha nueva herramienta sería coordinada de forma anual por una ciudad designada por el Comité de Cultura, aprobándose que el Ayuntamiento de Cádiz ejerciera durante el primer ejercicio la secretaria de la Red para su puesta en marcha.   Anteriormente, y como germen de todas las relaciones, Cádiz optó y presentó su candidatura, en octubre de 2006, para ser Capital Iberoamericana de la Cultura para el año del Bicentenario, aprobación que tuvo lugar en el seno de la la XXI Reunión del Comité Sectorial de Cultura celebrada en San José de Costa Rica. Cádiz, entonces, hacía historia al convertirse en la primera ciudad no-miembro de la UCCI que ostentaría el titulo de Capital Iberoamericana de la Cultura.   La aprobación formal de dicha designación tuvo lugar en Cádiz, en octubre de 2007, durante la celebración del XXXI Comité Ejecutivo de la UCCI en el Centro Cultural Reina Sofía.

La Unión de Ciudades Capitales de Iberoamérica
   
Al final de la década de los años setenta se desarrollaron procesos simultáneos de transición democrática en el continente americano y en la Península Ibérica, que añadieron un eslabón más a la historia en común de nuestros pueblos. Por esas mismas fechas, las ciudades, especialmente en Europa, empezaban a cobrar un protagonismo singular en el contexto de una región que se conformaba como un espacio de integración plurinacional.   Las grandes organizaciones internacionales de carácter municipal, especialmente FMCU y IULA, con larga tradición municipalista, estaban consolidadas y jugaban un papel importante, especialmente en el ámbito de los hermanamientos y en el de las relaciones entre las grandes urbes.
En España, a partir de la nueva política municipal emergente, como fruto de la Constitución democrática y de las Elecciones Municipales de 1979, los Ayuntamientos decidieron establecer fórmulas de cooperación internacional, utilizando la conocida herramienta del asociacionismo internacional y de los hermanamientos entre ciudades de categoría e intereses similares.   A partir de 1979 y bajo la presidencia del Alcalde Enrique Tierno Galván, el Ayuntamiento de Madrid asumió cierto protagonismo en el campo de las relaciones municipalistas internacionales. El Alcalde de Madrid llevó a cabo una intensa actividad en el ámbito europeo y latinoamericano, participando en los foros organizados por la Federación Mundial de Ciudades Hermanadas y posteriormente por el Consejo de Municipios y Regiones de Europa, lo que permitió marcar una nueva etapa en la cooperación municipalista a escala europea e incluso mundial.   Simultáneamente, sus viajes a Latinoamérica (México, Managua, Buenos Aires y Quito) y la participación del Ayuntamiento de Madrid a través de planes de cooperación activa en los procesos de transformación democrática en algunos países de América Latina (Nicaragua, Argentina, Brasil y Colombia) sirvieron para consolidar la idea del establecimiento de un marco propio de relaciones intermunicipales y la creación de una asociación de ciudades capitales iberoamericanas.

Fundación y definición  
La Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas se fundó en el año 1982, en dos reuniones consecutivas en las ciudades de Cádiz (con la presencia de SM El Rey Don Juan Carlos I de España, con motivo del lanzamiento de los actos que se desarrollarían, diez años después, por el V Centenario) y Madrid, donde el 12 de octubre los Alcaldes de las ciudades capitales iberoamericanas firmaron un hermanamiento múltiple y solidario.
La UCCI, que en sus Estatutos se define como una organización internacional, no gubernamental, de carácter municipal y sin ánimo de lucro, es miembro con estatus consultivo del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas desde enero de 1989, y se ha mantenido fiel, a lo largo de sus más de veintidós años de existencia, a los principios que la inspiraron: fomentar los vínculos, relaciones e intercambios de todo tipo entre las ciudades capitales iberoamericanas; impulsar el desarrollo armónico y equilibrado de éstas; y procurar la solidaridad y cooperación entre las mismas.
Desde el año de 1982, la evolución propia de la organización ha pasado por diferentes etapas, sin olvidar en ningún caso su vocación de integración y fortalecimiento democrático, que tanto había servido para inspirar sus objetivos fundacionales.